¿Sabías que más de 800.000 personas padecen de Alzheimer en España?

Según hemos podido saber por la Sociedad Española de Neurología, se concentra el 60% de los casos de demencia y cerca del 30% no están diagnosticados.

En las estadísticas de INE del año 2020, nos muestra, un mayor porcentaje de las mujeres que sufren este tipo de enfermedad, concretamente hablamos de un 10,64% en hombres y 13,2% en mujeres.

El Alzheimer es una enfermedad cerebral que causa demencia, su desarrollo es paulatinamente y empeora gradualmente con el paso del tiempo, hasta llegada la gravedad de interferir en las tareas cotidianas.

Los primeros síntomas que se pueden presentar en esta enfermedad, es la dificultad para recordar información recién aprendida, no encontrar las palabras adecuadas, problemas visuales y razonamiento deteriorado. Pero los síntomas no son generales, debido a que varían de persona a persona.

Los investigadores trabajan para revelar todos los aspectos posibles de la enfermedad. Actualmente, no existe cura para el Alzheimer, pero los objetivos del tratamiento son disminuir el progreso del Alzheimer y manejar los síntomas.

La estimulación cognitiva es una estrategia que se utiliza comúnmente en el tratamiento y manejo de la enfermedad de Alzheimer. Se basa en la idea de que el cerebro es capaz de adaptarse y cambiar a lo largo de la vida, incluso en presencia de enfermedades neurodegenerativas. Esta técnica consiste en ejercitar y estimular las funciones cognitivas afectadas.

Es importante señalar que a través de esta técnica, se puede recurrir a distintas actividades que pueden ser beneficiosas para la estimulación cognitiva. Estas actividades deben adaptarse a la etapa de la enfermedad, al nivel cognitivo y el potencial de cada persona, y deben estar supervisadas por un profesional.

Algunas actividades recomendadas incluyen:

  • Actividades físicas: los paseos diarios durante el verano pueden ayudar a mantener a las personas con Alzheimer activas y sanas.
  • Fichas de estimulación cognitiva: estas fichas pueden incluir ejercicios de atención, memoria, lenguaje y razonamiento.
  • Reminiscencias: pedir a la persona que hable sobre sus recuerdos y experiencias pasadas.
  • Pagos Exactos: estimula a la persona con Alzheimer a que seleccione la cantidad de dinero solicitada de forma exacta.
  • Musicoterapia: la terapia con música permite trabajar sobre los estados anímicos, aportando beneficios como la mejora de expresión.
  • Consignas con letras y palabras: realizar un juego para mejorar el lenguaje, proporcionando una letra y que lo relacione con una palabra.
  • Juegos de memoria al aire libre: como puede ser el «veo, veo» o «memorama», de esta forma ayudamos a mejorar la memoria.
  • Otra de las actividades que se puede realizar tanto al aire libre como en casa es, identificar objetos comunes en el entorno natural, como árboles o flores.
  • Realizar actividades de jardinería: como plantar flores, regarlas o cuidar de las plantas.

Es fundamental efectuar estas actividades para dar motivación y que suponga un reto para el paciente. Además, el diseño de las sesiones debe tener en cuenta todos estos parámetros para mejorar la autoestima y la autonomía del paciente.

Si algún familiar suyo padece de Alzheimer, pruebe este verano a realizar estas diferentes actividades, comunicándoselo a su médico. Esperemos que con el apoyo adecuado, su familiar pueda llevar una vida feliz.