Para algunos mayores o personas con movilidad reducida y/o discapacidad, tener hogares accesibles hace posible que puedan seguir viviendo en sus casas, incluso solas. Para ello, es fundamental lograr su máxima seguridad y movilidad, dándoles la oportunidad de seguir teniendo autonomía personal. A esto nos referimos al hablar de hogares accesibles, hogares que están exentos de barreras que imposibilitan tener una vida adecuada para cada una de las personas dependientes.

En primer lugar, para que sean viviendas adaptadas debemos tener en cuenta una serie de recomendaciones generales, estas pueden verse en nuestro post de Instagram. Además de estas, vamos a ver a continuación algunos consejos que van a hacer que cada instancia de nuestra casa sea más accesible eliminando o adaptando los elementos para facilitar una mayor dependencia y movilidad.

Consejos para hacer nuestros hogares más accesibles

Pasillos

Los pasillos y los lugares de tránsito deben ser anchos y sin mobiliario para qué las personas puedan pasar tranquilamente, sobre todo aquellas que están en sillas de ruedas. En general, se recomienda no tener mucho mobiliario y evitar algunos elementos decorativos como las alfombras. Estos elementos pueden causar tropiezos y caídas y dificultarnos el desplazamiento.

Además de estas recomendaciones, hay diversas herramientas que podemos instalar y que nos ayudaran a caminar con más seguridad y comodidad. Algunas de estas pueden ser un pasamanos instalado en el pasillo o un salvasillas para poder subir las escaleras.

Salón

El salón debe tener un buen tamaño para poder garantizar poder desplazarse con comodidad. Todos los elementos como la TV, el ordenador deben estar adaptados a la altura de la persona y colocados de forma que sea de fácil acceso. En cuanto a los aparatos como el aire acondicionado o las ventanas es importante que estén adaptados con mandos a distancia que nos facilite el encendido.

Habitaciones y dormitorios

La habitación debe tener una entrada amplia para poder tener una buena movilidad o hacer que una persona con movilidad reducida pueda moverse sin problemas. Es recomendable que haya mucha luz que ayude a la persona a ver de antemano las posibles barreras. Si es necesario, se podrá adaptar nuestra cama con algún dispositivo para que de forma individual y personal podamos realizar distintos movimientos.

Cocina

En la cocina, se deben adaptar los espacios como las encimeras, fregadero y estantes a la altura necesaria de forma que sean accesibles. Además, será necesario escoger electrodomésticos fáciles de utilizar. Un ejemplo de eso seria utilizar vitrocerámica en vez de tener una cocina de gas, en la que no necesitemos por ejemplo, cambiar la bombona.

Baño

En primer lugar, es necesario adaptar el baño sustituyendo la bañera por un plato de ducha. Este además no debe tener escalón para una mayor accesibilidad evitando accidentes. También se puede poner barras de apoyo en las paredes y cambiar el suelo con material antideslizante. Por último, y como en todas las demás instancias de las casa es necesario poder adaptar la altura de los elementos como el inodoro o el cristal del baño.

Exterior (jardín o patio)

Si tenemos una casa con un patio o jardín, lo mas importante es que el acceso a esta sea fácil tanto para personas mayores como para las personas con movilidad reducida o en silla de ruedas. La intervención más recomendable y habitual suele ser eliminar los bordillos o colocar rampas para garantizar la accesibilidad y seguridad del anciano. En caso de contar con piscina, la adaptación debe ser la misma, instalar rampas que nos proporcione accesibilidad.

Además de todas estas recomendaciones, existen muchas instalaciones y técnicas que según la dependencia de la persona puedan ayudarnos a hacer nuestra casa más accesible y que por lo tanto nos dé, una mayor tranquilidad y felicidad.